Portafolio profesional de artista
¿Qué es un portafolio profesional de artista? Básicamente, un portafolio profesional de artista es la herramienta utilizada por creadores o profesionales para presentarse a sí mismos y sus trabajos ante galerías, instituciones culturales, becas, convocatorias, coleccionistas o futuros empleadores. No sólo los artistas hacen uso de esta herramienta fundamental: diseñadores, ilustradores, fotógrafos y otros profesionales dependen del portafolio para promocionar su trabajo y buscar opciones de empleo.
En la actualidad, el portafolio profesional de artista puede presentarse en formato impreso o digital (CD, memoria USB, sitio web personal o plataformas en línea como DevianArt o Behance). Cada uno de estos formatos tiene sus ventajas e inconvenientes, de ahí que muchos artistas se decanten por una combinación de ambos.
- Fáciles de ver. El contenido debe estar adecuadamente estructurado. Existen diversas formas de organizar los trabajos: cronológicamente, por técnicas, temáticas, manifestaciones, etc. Sé consecuente con el tipo de organización que elijas y replícala en todos los formatos de tu portafolio.
Atractivos visualmente. Para que el portafolio destaque tanto el diseño como la presentación deben ser sumamente cuidados. Elije un diseño discreto pero efectivo, que resalte las obras pero incluya tu esencia como artista y contenga algún elemento diferenciador.
Realiza una selección rigurosa de tus trabajos. Esta es quizá una de las cuestiones más complicadas a la hora de elaborar un portafolio. En muchas ocasiones caemos en la tentación de incluir un gran número de obras, pero en el portafolio la máxima de “menos es más” se cumple a cabalidad. Como tu carta de presentación, el portafolio debe incluir tus mejores trabajos y aquellos que representan tu estilo como artista. Si es necesario, apóyate en especialistas que hayan trabajado con tus obras o en colegas que conozcan tu trabajo. Si realizas tu portafolio en formato físico o PDF, debes priorizar tus trabajos más recientes y no sobrepasar las 30 imágenes. Por el contrario, un portafolio en línea permite mayor flexibilidad en este sentido, ya que puedes mostrar la evolución de tu obra sin sobrecargar la atención del público.
Imágenes de excelente calidad. De más estar decir la importancia de que tu trabajo sea reproducido con calidad y fidelidad. La obra de arte es la protagonista absoluta de un portafolio, de ahí que las imágenes que las representan deben reproducir fielmente sus características. Si es necesario, contrata a un profesional que te auxilie en esta tarea. Para los portafolios en línea, utiliza el formato JPEG y no menos de 600 px.
Ofrece la información adecuada de las piezas. La ficha técnica de las obras es esencial. Básicamente, debes incluir la técnica, el soporte o formato, medidas, fecha de realización, y si la obra se encuentra expuesta en alguna institución o pertenece a alguna colección, es un dato que puede ser interesante. También deja consignado si la obra ha obtenido un premio en algún concurso o convocatoria artística. Por último, debes valorar incluir el precio, teniendo en cuenta el público al que va dirigido tu portafolio.
Contenido textual. Debes incluir una declaración artística o statement, biografía o CV así como tus datos de contacto. Una carta de presentación o fragmentos de publicaciones que analicen tu trabajo también puede ser interesante. Para escribir tu declaración artística ten en cuenta los siguientes elementos: escríbela en primera persona, que sea corta y concisa (mejor no sobrepasar las 500 palabras), clara y reflexiva (no abuses de tecnicismos, expresa claramente qué haces, por qué lo haces, qué significado tiene tu trabajo, cuáles son tus procesos de trabajo o tus investigaciones en el ámbito artístico). Si tu fuerte no es la redacción o la escritura, apóyate en un profesional que garantice la idoneidad de los textos incluidos en tu portafolio.
Fáciles de ver. El contenido debe estar adecuadamente estructurado. Existen diversas formas de organizar los trabajos: cronológicamente, por técnicas, temáticas, manifestaciones, etc. Sé consecuente con el tipo de organización que elijas y replícala en todos los formatos de tu portafolio.
Atractivos visualmente. Para que el portafolio destaque tanto el diseño como la presentación deben ser sumamente cuidados. Elije un diseño discreto pero efectivo, que resalte las obras pero incluya tu esencia como artista y contenga algún elemento diferenciador.
Realiza una selección rigurosa de tus trabajos. Esta es quizá una de las cuestiones más complicadas a la hora de elaborar un portafolio. En muchas ocasiones caemos en la tentación de incluir un gran número de obras, pero en el portafolio la máxima de “menos es más” se cumple a cabalidad. Como tu carta de presentación, el portafolio debe incluir tus mejores trabajos y aquellos que representan tu estilo como artista. Si es necesario, apóyate en especialistas que hayan trabajado con tus obras o en colegas que conozcan tu trabajo. Si realizas tu portafolio en formato físico o PDF, debes priorizar tus trabajos más recientes y no sobrepasar las 30 imágenes. Por el contrario, un portafolio en línea permite mayor flexibilidad en este sentido, ya que puedes mostrar la evolución de tu obra sin sobrecargar la atención del público.
Imágenes de excelente calidad. De más estar decir la importancia de que tu trabajo sea reproducido con calidad y fidelidad. La obra de arte es la protagonista absoluta de un portafolio, de ahí que las imágenes que las representan deben reproducir fielmente sus características. Si es necesario, contrata a un profesional que te auxilie en esta tarea. Para los portafolios en línea, utiliza el formato JPEG y no menos de 600 px.
Ofrece la información adecuada de las piezas. La ficha técnica de las obras es esencial. Básicamente, debes incluir la técnica, el soporte o formato, medidas, fecha de realización, y si la obra se encuentra expuesta en alguna institución o pertenece a alguna colección, es un dato que puede ser interesante. También deja consignado si la obra ha obtenido un premio en algún concurso o convocatoria artística. Por último, debes valorar incluir el precio, teniendo en cuenta el público al que va dirigido tu portafolio.
Contenido textual. Debes incluir una declaración artística o statement, biografía o CV así como tus datos de contacto. Una carta de presentación o fragmentos de publicaciones que analicen tu trabajo también puede ser interesante. Para escribir tu declaración artística ten en cuenta los siguientes elementos: escríbela en primera persona, que sea corta y concisa (mejor no sobrepasar las 500 palabras), clara y reflexiva (no abuses de tecnicismos, expresa claramente qué haces, por qué lo haces, qué significado tiene tu trabajo, cuáles son tus procesos de trabajo o tus investigaciones en el ámbito artístico). Si tu fuerte no es la redacción o la escritura, apóyate en un profesional que garantice la idoneidad de los textos incluidos en tu portafolio.
Aun cuando muchos creadores elijen el formato digital en PDF como forma de presentar su portafolio profesional de artista, el formato digital en línea gana terreno a marchas forzadas por su versatilidad, su alcance global, la posibilidad de contar con un espacio ilimitado y su fácil actualización.
Es por esto que en Tojunto Soluciones te ofrecemos la posibilidad de elaborar un portafolio en línea que no sólo se adecúe a los requerimientos recogidos en este artículo, sino también que recoja visualmente tu esencia como artista y los rasgos distintivos de tu trabajo. Podemos apoyarte, igualmente, en la reproducción fotográfica de tus obras y en la redacción de los textos. Además, si en el futuro decides desarrollar una página web más completa, con nuestros portafolios tendrás el punto de partida ideal y una base tecnológica desde la cual desarrollar tu sitio.